23 Jul III Encuentro de Planeadores Antiguos en Santo Tomé del Puerto
“Para buscar la paz, solo tienes que subir alto, y dejar que el viento te ayude a encontrarla”. Si esto lo hubiese dicho, Lorca o Alexandre, o cualquiera de los inmortales poetas que han escrito en nuestra lengua, seguro que sería el lema de algún club de vuelo, pero lo dijo uno de los muchos afortunados, que durante la semana que fue del 13 al 19 de julio de 2009, tuvieron la oportunidad de subirse a un planeador gracias al Club Loreto, y al Real Aero Club de España, que por tercera vez, organizaban un encuentro de planeadores antiguos. La cita fue en el aeródromo de Santo Tomé del Puerto, y en ella se tuvo la oportunidad de admirar, tanto en tierra como en vuelo, casi una docena de planeadores. Además, tres pilotos de otras tantas aeronaves se desplazaron hasta Santo Tomé, una Piper L-14 pilotada por José Luis Olías, y una Bücker, con Carlos Bravo a los mandos, y Javier López con otra Bücker, fueron también objeto de muchos flashes y comentarios de admiración.
La cita contó con muchas visitas, familias enteras, spoters, mucho público, unas en aviones y otras en coches, tres en concreto que dieron también color posando al lado de la aeronaves antiguas, fueron dos Ford magníficamente restaurados y un Willys de 1944 en perfecto estado.
La labor que el Club Loreto lleva haciendo desde el año 1986, cuando se fundó, es digna de todo elogio. Su objetivo no es otro que acercar el vuelo a vela al gran público. Para ello organiza concentraciones como la que os contamos, pero también tienen una magnífica escuela de la que han salido campeones de España en todas las categorías. Se puede decir, que los mejores instructores de nuestro país imparten sus lecciones magistrales todos los fines de semana del año. Toda esta tarea de divulgación del vuelo a vela está acompañada de algo que contribuye a recuperar y mantener nuestra memoria aeronáutica: la restauración de planeadores.
En este tercer encuentro de planeadores antiguos se ha podido admirar aviones como el Kranich II, un velero, considerado en su tiempo, como el mejor del mundo. AISA fabricó en nuestro país 50 unidades, encargadas por el Ejército del Aire entre 1948 y 1953, es decir, toda una joya de nuestra aviación. También se ha podido ver el Slingby T-21 fabricado en 1947 o a su evolución, el Slingby T-31. En definitiva, una excelente reunión en la que se pudo disfrutar, no solo admirando a estos veteranos del aire, si no también disfrutando de ellos. El Club Loreto dio la oportunidad a todos aquellos que quisieron de poder subirse a los cielos, y no fueron pocos. Durante los siete días que duró la concentración, los veleros cubrieron el cielo de Santo Tome con sus idas y venidas. Con un magnifico tiempo lo que propicio que se pudiera volar mucho.Es difícil calcular cuantos intrépidos disfrutaron de un vuelo, pero baste decir, que el piloto de la Husky, acabó, digamos, hasta el “gorro” de remolcar veleros.
Como siempre, este tipo de acontecimientos, no se deben única, y exclusivamente, a la labor de uno solo, en este caso, el Club Loreto, hay que contar con mucha ayuda. A la ya comentada del Real Aero Club de España, también colaboraron en el evento la Fundación AENA, SENASA, Avión Revue, Repsol YPF y Aerovel. Sin ellos, no se hubiera podido reunir tan importe número de veleros. Desde aquí queremos animar a todos aquellos patrocinadores para que al año que viene, vuelvan a estar con los chicos del club Loreto, y se pueda organizar el cuarto encuentro de planeadores antiguos.
