Real Aero Club de España

Quiénes somos

El Real Aero Club de España es mucho más que la unión de los distintos aeroclubs españoles. Sumándose a las iniciativas que comenzaban a proliferar en Europa, el Real Aero Club de España se inauguró el 18 de mayo de 1905, constituyéndose como el primer aeroclub español. Poco tiempo después, en octubre de ese mismo año, se convirtió en cofundador de la Federación Internacional Aeronáutica (FAI), organismo dedicado a la elaboración de normas y registros de la aeronáutica y astronáutica. Tras más de cien años de actividad, esta organización supone la vía oficial para la divulgación de la Aviación General y Deportiva y el medio más adecuado para la defensa de las instalaciones aeronáuticas españolas.

Funciones clave

Divulgación de la cultura aeronáutica: Una de las funciones del Real Aero Club de España es aumentar el conocimiento de esta materia entre los ciudadanos y fomentar la vocación y la pasión por la aviación.

Fomento de la Aviación General y Deportiva: El Real Aero Club de España crea, difunde y potencia actividades relacionadas con la Aviación General y Deportiva, con el fin de aumentar su presencia en España.

Estandarización de escuelas de vuelo españolas: A través del Real Aero Club de España se trata de mantener un estándar mínimo en todas las escuelas de vuelo, para que haya uniformidad en la formación de los pilotos.

El Real Aero Club de España sirve como interlocutor ante los diferentes organismos públicos y europeos para la defensa de los intereses e inquietudes de sus miembros -tanto de las entidades adheridas al Real Aero Club de España como de sus socios e integrantes-, así como de centro de consulta con una clara vocación de entidad de utilidad pública.

Fortalece los lazos con los países de nuestro entorno

Interlocutor válido ante las Administraciones del Estado

Altavoz de las necesidades e inquietudes de sus socios

Centro de información para todos los asociados

Instalaciones

El Real Aero Club de España fue constituido hace más de 100 años. S.M. el Rey Don Alfonso XIII, nombrado primer presidente de honor de la entidad, inauguró oficialmente las primeras instalaciones en las que operaría el primer aeroclub de España, ubicadas en el campo de vuelo del Gasómetro en Madrid. Años más tarde, en 1951, obtendría la propiedad del Aeródromo de Cuatro Vientos de Madrid, donde ha permanecido hasta nuestros días.